Desperté sobresaltada, con un grito ahogado, uno que se me removió por dentro deseoso de salir y tras tragarlo mi pecho noto el peso de lo que pujaba por salir. Levanté aun con aquel peso y me asomé al balcón, desde allí observé la frialdad y la soledad de la calle, fuera todo parecía aun dormido…
Un viento helado anunciaba ya el crudo invierno acechante… rozó mis labios, rozó mi pelo y lo alborotó… lo aparté lentamente del rostro y notando una vez mas su caricia en mi piel recordé mi sueño y una lagrima recorrió mi mejilla haciendo aun mas patente el frío de la mañana… el frío….- frío…. Cuanto frío…- susurré y aquel recuerdo quedó como una muesca mas en mi corazón….
Siempre había tenido sueños vívidos, pero sabía también que el hecho de poder soñar algunas cosas que luego se cumplían o simplemente era una verdad que yo conocía sin saber ¿cómo? ni ¿por qué?… pero lo sabía y de igual forma sabía que aquel era uno de esos sueños…
Desperté a Raúl y entre susurros le relaté lo que me había sobresaltado…
-He visto donde está… -dije aun con la fría lágrima quemando mi mejilla
…Vi como en la fría noche, tras todo lo que había vivido, como si de una pesadilla se tratase, ella quedó fría… su piel se apagó, sus ojos quedaron sin brillo, sus labios se entreabrieron y se relajaron y con la mirada pérdida en la nada quedó en quietud, mientras el caos se formaba a su alrededor… no sabían que hacer, maldecían y la ira se apoderó de ellos… vi como sus miradas, barajaban las distintas posibilidades y se decantaron por lo más egoísta, por la mas terrible de las decisiones… y ella quedo sumergida en un frío eterno y observé como su alma quedó atada a ese cuerpo sin vida, a ese frío sepulcro que por siempre guardaría su llanto infinito… y ni ella sabía donde estaba… ni nadie lo encontrará jamás…
-¿tú no sabes donde está…?
-…sí… pero no puedo decirlo… ¿cómo puedo explicar a nadie que sé donde está por un simple sueño?… ¡¡¡¡nadie me creería¡¡¡¡… ella me miró a los ojos y me dijo… tu destino será nefasto si hablas… yo ya estoy muerta… no te preocupes… no pueden callar para siempre…- dije dejando caer una lágrima más- ¿pero y si sí pueden callar para siempre?... ¿Qué será de ella en aquel frío sepulcro…? ¡¡¡No puedo dejarla allí… está tan sola¡¡¡¡¡- grité presa del horror y abalanzándome a los brazos de mi amado…
Él me calmó entre sus brazos y con sus besos enjugó mis lágrimas que parecían dolorosamente incontrolables.
-Tranquila… mi amor… duerme… mañana será otro día…
-Abrázame… tengo tanto frío… tanto…
Y poco a poco recuperé la paz entre sus brazos… y poco a poco volví a sentir calor en mi piel en contacto con su piel… pero nunca olvidé, el frío sepulcro en el que ella esperaba aún…
Nací como humana pero mis sueños me hicieron escribiente... con la pluma entre los dedos, marcaba mis sueños en un papiro fino y roto. Soñaba para escribir, escribía para revivirlos y cuanto más soñaba más escribía y más deseaba cumplir mis sueños. Llegué a adulta y aun ocupaban mi mente, me dejaba llevar a un fantástico mundo donde solo con mi pensamiento era princesa, guerrera, hada o musa…No quiero una vida real si no tengo sueños... nací como humana pero mis sueños me hicieron escribiente…
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ResponderEliminarTendida sin vida, sola con su muerte, déjala que él te abrace para pensar en la vida. Déjala, a ella sola con su frío en el alma atado para siempre. Déjala, pero...no la olvides, ese sueño transmite un mensaje melancolico de soledad eterna, nadie me habla de cómo será ese frío, pero sus abrazos y sus besos, son cálidos, y tu piel.
ResponderEliminarMuy bella reflexión, siempre me gusta, no sé porque, pasear entre las estátuas de los cementerios, siento, a veces su frío y sus voces. Bsito cálido.
igraine
ResponderEliminaren el relat0 enteri0r me encant0 l aescrit0ra que describe...
en este la primera parte me ha encantad00000
n0 se c0m leches l0 c0nsigues...me es tan dificil hacer es0¡¡¡
el fri0 de la muerte...
nunca he t0cad0 un cadaver fri0...per0 si te pued0 hablar de que 0curre cuand0 un0 se va para alla...
sabes, en una 0casi0n n0 aguantaba mas...me estraba ah0gand0 en le mar...mis fuerzas ya n0 me aguantaban...decidi dejarme en man0s de la muerte...y sabes, esta n0 es abs0lutamente nada...ni es fria, bi negra, ni nada...asi la vivi y0.
bes0s
Opino que tendré que releerlo,no porque no lo haya entendido, sino porque sospecho que es de los que se degustan cuando te sumerges en sus letras con regodeo.
ResponderEliminarEspero que ese fío no cale hasta los huesos ...
Un abrazo desde los mares de encinas extremeños.
Hola Igraine.
ResponderEliminarPrecioso relato, describes perfectamente el frío interior que produce el estar convencida de que tu sueño es real, suerte que tu protagonista tiene junto a ella quien la tranquilize para conseguir entrar en calor.
Un beso de Mar
Los sueños premonitorios son como un abrigo para arropar nuestro miedo, pero no sirven para quitar el frio de la soledad.
ResponderEliminarUn beso
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ResponderEliminarNo ha existido, te digo, màs vida, que esta que percibiste dolorosa o felizmente...
ResponderEliminar- ¿Dònde estoy, donde me encuentro?
- Ni màs oscuridad, que la que se ha proyectado en estos techos, ahora que de noche es...
- Me siento algo confuso, tù quien eres...
- Ni sopla otro viento, que aquèl que movìa los ramajes... Ni màs invierno, que aquel en el que porfìa este frìo que se ha colado en tus pulmones.
Eres ya un viejo. Sin embargo, todavìa, no moriste.
Has respirado con dificultades. Hablas, pero tus palabras apenas se entendieron. Los pelos de tu piel en el pomo de una mano, has sentido que se erizan. Te estremeces. Y ademàs, tenìas sed...
- Agua, agua...
- ¿Has oìdo lo que han dicho? Este paciente, mira, pide algo.
Tèsalo
He tenido sueños que me produjeron escalofríos, de tan reales que parecían. Estoy convencida que siempre anuncian algo.
ResponderEliminarTe sienta bien este género.
Besos.
Un texto certero, hasta sentí escalofríos leerte :)
ResponderEliminarUn abrazo...
Mi querida Igraine,
ResponderEliminar"Un viento helado anunciaba ya el crudo invierno acechante… rozó mis labios, rozó mi pelo y lo alborotó… lo aparté lentamente del rostro y notando una vez mas su caricia en mi piel recordé mi sueño y una lagrima recorrió mi mejilla haciendo aun mas patente el frío de la mañana… el frío….- frío…."
Creo que este frío se te metió dentro y de ahi tu sensación. No dejes que ocurra eso. Ponle freno. En tus manos está.
Un besazo